El Papa Francisco dijo el jueves a los profesionales de la salud que tiene “bronquitis infecciosa muy aguda” y le aconsejaron no viajar a Dubai para evitar el cambio extremo de temperatura.

El Papa, que cumplirá 87 años el 17 de diciembre, bromeó: “Como pueden ver, estoy vivo”, mientras se reunía con los participantes de un seminario sobre ética de la atención médica en una audiencia matutina en el Vaticano.

“Gracias a Dios no fue neumonía. Es una bronquitis infecciosa muy aguda. Ya no tengo fiebre, pero sigo tomando antibióticos y cosas así”, dijo el Papa Francisco el 30 de noviembre.

A pesar de sentirse mal, el Papa mantuvo una agenda muy apretada el jueves con nueve reuniones oficiales programadas para la mañana, incluida una audiencia con la Comisión Teológica Internacional, obispos de Canadá y el obispo alemán Heiner Wilmer de Hildesheim.

El Vaticano ha calificado el estado de salud del Papa como “gripe” con “inflamación pulmonar” que le ha causado algunas “dificultades respiratorias”.

La bronquitis aguda es una inflamación de las vías respiratorias que llegan a los pulmones (llamadas bronquios) que puede ser causada por los mismos virus que la gripe, pero también puede ser causada por una infección bacteriana.

La bronquitis es una complicación diferente, pero común, de la influenza que puede causar tos persistente, dificultad para respirar, fatiga y dolor en el pecho. La bronquitis aguda puede ser contagiosa, según la Clínica Mayo.

Una tomografía computarizada realizada en un hospital de Roma el 25 de noviembre “descartó neumonía”, según el Vaticano.

El 28 de noviembre, el portavoz del Vaticano Matteo Bruni dijo que los médicos del Papa le habían aconsejado que no viajara a Dubai esta semana para la conferencia climática COP28 de las Naciones Unidas porque el Papa tenía “gripe e inflamación del tracto respiratorio”.

El propio Papa Francisco explicó la decisión el jueves en sus comentarios improvisados ​​en español en el seminario sobre atención médica.

“El médico no me dejó ir a Dubai. La razón es que ahí hace mucho calor y pasas de la calefacción al aire acondicionado”, dijo, señalando que ese cambio de temperatura no sería bueno para su “afección bronquial”.

El Papa Francisco fue hospitalizado en marzo debido a una infección respiratoria y se quejó de que no se sentía bien el 6 de noviembre, tras lo cual el Vaticano dijo que el Papa estaba “un poco resfriado”.

En su breve discurso en el seminario sobre Ética de la Gestión Sanitaria, el Papa Francisco dijo que era un fanático de la “medicina preventiva”.

“La salud es como una cosa contraria; es fuerte y frágil... La salud mal cuidada da paso a la fragilidad. Me gusta mucho la medicina preventiva porque previene antes de que ocurran los acontecimientos”, dijo el Papa Francisco.

“Les agradezco que hayan venido y me perdonen por no poder hablar más, pero no tengo fuerzas”, añadió.

Fuente: